Más que un cambio de número se debe aspirar a un cambio en nosotros, a
estar en constante progreso hacia una mejor perspectiva de vida.
Os deseo lo mejor siempre, pero aprovecho el nuevo año para
desearos que no falten los colores en vuestras vidas, la magia de una
sonrisa y la emoción de vivir.
¡Bienvenido 2015, con tus mil sorpresas, alegrías y lecciones por estrenar!